David Villa ha enfilado el camino para hacer historia en el fútbol español. "No sólo me ha cazado a mí y atrapará a Di Stéfano. Va a superar a todos, hasta a Raúl", augura Julio Salinas, a quien el Guaje ya ha igualado en el ranking de artilleros con la roja.
El delantero asturiano del Valencia se reivindica gol a gol en cada partido. En su equipo y en la selección. Está en racha. El pasado verano se fue de vacaciones como pichichi de la Eurocopa -a pesar de que se perdió la final por lesión- y ha empezado la nueva temporada al mismo nivel.
Peldaño a peldaño, los guarismos le encumbran como rey del área y mañana, en el encuentro que la selección española disputará frente a Bélgica, en Bruselas, podría dar caza e incluso superar al mítico Alfredo di Stéfano, quien, con un tanto más que él, es quinto clasificado en la relación de goleadores de la historia del equipo nacional.
"Claro que Villa es un buen jugador, y la selección lo está haciendo muy bien como equipo", puntualiza La Saeta, que con su amplio bagaje está más que de vuelta de registros, de recuentos, de historias y de estadísticas, y se revela cuando se le nombran esos datos en espera de una respuesta. "¿Y qué tengo que decirle? ¿Qué pretende que diga yo?", se pregunta con tono de desagrado.
Sin embargo, el legendario Di Stéfano no tarda en mostrar su guasa habitual, siempre aliñada por la cadencia de un acento argentino que nunca ha abandonado, y acaba bromeando sobre la posibilidad de que el delantero asturiano rebase mañana su marca."Mira, cuando yo jugaba no marcaba goles para entrar en ningún concurso, ¿sabes? Yo era un jugador de un equipo, de la selección... Y si hubiera sido por sólo hacer goles, no le habría pasado a nadie la pelota. Me la habría quedado para mí solo...", resuelve irónico.
Los números no engañan.
Desde que el 9 de marzo de 2005 Luis Aragonés dio a David Villa la oportunidad de debutar con la selección española en el partido de clasificación para el Mundial de Alemania, frente a San Marino, el futbolista asturiano ha participado en 39 encuentros en los que ha conseguido los 22 goles que acumula. Su primer tanto fue en Bratislava, en el empate a uno con Eslovenia, en noviembre de aquel primer año, y el último el jueves, en Tallín, en la goleada a Estonia.
El siete de España, dorsal que tomó cuando Raúl dejó de acudir a las convocatorias, lleva un promedio de 0,56 goles por partido con la roja.
Todavía, pues, le falta bastante para llegar al techo de 44 que ostenta el madridista Raúl.
Previamente ha de dar caza a Butragueño (26 goles), Morientes (27) y Hierro (29). Sin embargo, por sus cualidades y por su edad, nadie duda de que está en condiciones de aspirar a convertirse en el máximo goleador de la historia del fútbol español.
"Para mí David Villa no ha sido ninguna sorpresa -prosigue Julio Salinas-; ya se veía en su etapa del Sporting y luego en el Zaragoza y el Valencia. Tiene 27 años, ¿no? Pues le quedan un mínimo de cuatro, tirando por bajo. Y entre Eurocopa, Mundial y partidos de clasificación... Va a pasar a todos. Hasta a Raúl. Seguro."Mañana, en el estadio Rey Balduino de Bruselas, aparte de aspirar a batir la marca de Di Stéfano, Villa tiene un duelo personal con el belga Wesley Sonck, que después de tres jornadas de la fase previa de la clasificación para el Mundial de Suráfrica aparece también con cuatro goles.
En la charla con Julio Salinas, el ex jugador considera que el meteórico despegue del Villa se produjo a raíz de que España se adjudicara la Eurocopa en la que el asturiano fue máximo realizador. "Todos los futbolistas salieron reforzados de forma mediática. Villa, Xavi, Iniesta... Pero ocurre que aquí tenemos el defecto de que siempre se valora más a los extranjeros.
A no ser que los de aquí hagan algo excepcional, a los otros se les da más valor.
A jugadores como él o como Iniesta, que es de los mejores del mundo, no se les da ni bola...", se lamenta.Mientras que Di Stéfano elude pronunciarse sobre la negativa de Villa, que este verano dio calabazas a un Real Madrid que le pretendía incorporar en sus filas, Julio Salinas sí se moja.
En consonancia con las recientes declaraciones de Bernd Schuster, quien acusó de falta de ambición al Guaje, Julio Salinas asegura que le sorprendió la decisión adoptada por Villa, "aunque sus razones tendría para rechazar la oferta. Sin que esto se pueda entender como menospreciar para nada al Valencia, yo pienso que renunciar a ir a un club como el Real Madrid o el Barcelona, que están en la élite mundial, cuanto menos sorprende bastante".
Al margen de cuestiones económicas, Julio Salinas considera que la decisión del goleador valencianista no se apoyó en la tan socorrida expresión de preferir ser cabeza de ratón que cola de león. "Siempre hay opiniones, pero hay que pensar también que en el Real Madrid hay muchísima más presión mediática que en los demás equipos, más competencia para jugar, estás en primera página de todos los periódicos del mundo... Al final en el Valencia será un ídolo, pero siempre le quedará la duda de qué hubiera pasado de haberse ido de Mestalla."
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