Soldado: "Somos muy débiles si no estamos al cien por cien"

Roberto Soldado firmó su mejor noche como valencianista el martes con un doblete contra el Glasgow Rangers. Una victoria que tiene de todo: tres puntos que dejan a tiro el pase a octavos de la Champions, un golpe de autoridad, freno al pesimismo que empezaba a avanzar e, incluso, algo de autocrítica.

Si no hubiera ganado al Rangers ¿estaríamos en un clima de pre guerra civil en el Valencia?

El equipo en los tres últimos partidos no estaba encontrando su juego, nos costaba mucho imponer nuestro estilo. No estábamos cómodos en el campo y la afición estaba un poco nerviosa. La importancia del partido del martes era enorme porque nos jugábamos la vida contra un rival muy difícil.

No fue un triunfo cualquiera, ¿un poco de autoridad era lo que necesitaba el equipo?

Lo habíamos hablado en el vestuario. Necesitábamos ese golpe de autoridad, sobre todo para nuestra confianza. Hemos sufrido muchísimo para ganar partidos esta temporada y sacar adelante un partido así, que también hubo que trabajarlo, te da mucha seguridad. Y lo hicimos en nuestro campo donde no estábamos muy cómodos tampoco.

El Valencia hizo un partido casi perfecto, pero el primer gol llegó con algo de suerte.

Cualquier equipo que acumula tantos jugadores en defensa hace más difícil que encuentres huecos y crees ocasiones. Hasta el gol el equipo estaba muy bien, buscando la pelota con mucha movilidad arriba. Hacíamos peligro, pero el gol viene con un poco de suerte, con un rechace e incluso el balón entró llorando.

Su segundo tanto sí tuvo una ejecución de manual. Su carrera en velocidad y el disparo cruzado, hasta se le veía más liviano corriendo hacia la portería.

Ahora estoy un poco más fino que el año pasado y lo estaba notando en el juego, aunque me estaba costando encontrarme con el gol. Estaba seguro de que estaba haciendo un buen trabajo y que la recompensa iba a llegar pronto. Afortunadamente llegó contra el Rangers.

Habrá quien utilice la victoria para argumentar que el 4-4-2 es el mejor sistema para el Valencia.

Depende del rival contra el que juegues. El Rangers es un equipo que defiende con mucha gente atrás, cinco defensas, cuatro centrocampistas que estaban muy pegados. Cuanta más gente hubiera en el área iba a ser mejor para nosotros. Sabíamos que iba a haber muchos centros al área y acumular atacantes nos daba más opciones de rematar a gol. El planteamiento del entrenador fue bueno y esperemos que en el próximo partido vuelva a acertar.

¿Las rotaciones marean a los jugadores?

La plantilla es muy competitiva y cualquiera que juegue lo puede hacer igual o mejor que el compañero y hay que acoplarse a la idea del entrenador. Tenemos que achacar ese bajón del equipo a eso, yo creo que los jugadores no hemos dado el rendimiento que tenemos que dar.

¿El Sevilla amenaza el punto de inflexión que ha supuesto el partido de Champions?

Es un partido muy importante si queremos seguir en la zona alta de la Liga. El Sevilla es un rival directo con un equipo que también ha sembrado alguna duda. Pero tenemos que ir a por ellos, porque el Valencia tiene que dar el nivel ante los equipos grandes y el Sevilla es un grande también.

¿ Cómo se explica desde el vestuario la involución del equipo y el proceso de crisis que se vivía alrededor del Valencia?

Dentro del vestuario estábamos relativamente tranquilos porque trabajábamos bien durante la semana, pero sí que es verdad que llegaba la hora del partido y el equipo ni daba su carácter ni encontraba su estilo. Incluso habíamos perdido una cualidad como la agresividad defensiva. Nos hemos demostrado que cuando no estamos al cien por cien somos muy débiles. Después de esta mala racha nos hemos puesto las pilas para todo lo que nos puede venir.

Los malos resultados provocaron una reacción muy en contra del equipo desde la grada.

Todos nos acostumbramos muy rápido a lo bueno. Empezábamos bien los partidos y eso nos ayudaba a mantener el resultado hasta el final, pero en los últimos nos ha pasado lo contrario. El equipo está avisado del nivel que puede dar al cien por cien y cuando no lo está nos puede ganar cualquiera.